La era de los Hippie-pijos

Los tiempos han cambiado y de que manera. Atrás quedaron aquellas reuniones en restaurantes lujosos donde había que ir con traje y corbata para dar paso a almuerzos informales entre comida naturista baja en calorías; las oficinas lujosas han dado paso a espacios abiertos con conceptos poco arbitrarios como los que nos muestra hongkiat; o las habituales reuniones de trabajo se han convertido en conference virtuales a través de dispositivos móviles en cualquier parte del mundo.

Toda esta globalización y la suma de las nuevas tecnologías han originado nuevos estereotipos donde los hippie-pijos han irrumpido con fuerza.  Emblemas como la mítica california de WV que ahora ronda los 60k € ya no está al alcance de cualquiera que quiera recorrerse las playas en busca de fiestas. Chiringuitos como el GATA en plena movida alternativa en Zahara de los Atunes busca este tipo de público aprovechando el tirón de «celebrities» que lo único que buscan es no dar palo al agua gracias al nombre de alguien cercano o de papa. Atrás quedaron los pijos de toda la vida con su lacoste, sus levi´s y los jerseys a los hombros.

Pero no nos engañemos, el concepto de hippie-pijo no es ni debe ser un concepto peyorativo (siempre y cuando no se lleve al extremo, como todas las cosas). Hoy en día se vive a un ritmo extremo, rodeado de presión, con una competitividad sin límites y donde la globalización da la oportunidad de acceder prácticamente a todo. Un mundo que nos pone en el filo continuamente y donde se intenta buscar un equilibrio en lo físico y espiritual para poder sobrevivir.

Aquí es donde se ha cambiado el concepto que había anteriormente donde el ocio y los gustos estaban preestablecidos por el estatus social… lo más era jugar al golf o tenis, veranear en Ibiza, esquiar en andorra, ser abogado o médico, ir a hoteles de 4 estrellas… Ahora la gente busca válvulas de escape que se salgan de los estereotipos donde te da igual «lo que diga el manual». Practicar kitesurf, hacer snowboarding,  pasar unos días en Tarifa o Somo, alojarse en apartamentos de intercambio o trabajar rodeado de tecnología ha creado un estereotipo nuevo de personas que no se guían por «lo que debería de ser» sino por lo que «me pide el cuerpo»… cuidando el cuerpo y la mente como principal idea.

Gente como Richard Branson (fundador de Virgin) practica kitesurf en lugar del golf, Chayane promocionaba la costa mexicana como spot para hacer este deporte durante este verano, las nuevas generaciones de la nobleza como la princesa Mete Marit es una adicta del snow… gente preparada que antepone sus gustos y aficiones a los estereotipos. Si a esto le sumamos la búsqueda de lo alternativo, de lo informal y de lo sencillo… tenemos los hippie-pijos.

[youtube=http://www.youtube.com/watch?v=nUOyZJZCbeE&feature=player_embedded]